Se trata de un plano en el que un coche seiscientos, está abandonado en medio de la naturaleza. Volvemos a la idea del deterioro. Un objeto ajeno a lo natural, es puesto ahí por la mano del hombre. Éste lo abandona al ser considerado un trasto inservible y lo mezcla con una flora que a su vez, está rodeada de muros de adobe y piedra, en los que también se aprecia el paso del tiempo. Las plantas y los árboles han resurgido envolviendo estos elementos ajenos. La naturaleza empieza a convivir con ellos y en el momento captado por el plano, vemos cómo un gato pasa por delante de la escena integrado perfectamente en un lugar que en principio podría resultar solitario.
El fragmento seleccionado en el montaje final tiene una duración de nueve segundos.
Fotograma del vídeo final en formato panorámico 16:9.
Otras fotografías del lugar:
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